Yoga infantil, dónde y cómo practicarlo para tener mejor salud

Todos conocemos los beneficios que el yoga trae para la mente, el espíritu y el organismo. Pero ¿te has parado a pensar si tiene algún efecto positivo en los niños? Pues has de saber que el yoga infantil es una disciplina muy adecuada en estas edades. A continuación, te explicaremos las principales razones.

¿Por qué los niños deberían hacer yoga?

La conexión, tanto interior como hacia el exterior, es uno de los beneficios que podemos alcanzar con la práctica de este conjunto de técnicas de concentración basada en filosofías orientales. Sin embargo, los motivos para iniciarse en esta actividad desde tempranas edades van mucho más allá.

Beneficios del yoga para niños

Ya a los siete u ocho años de edad es posible que los peques se interesen por el yoga que se imparte en edades infantiles y comiencen a practicarlo. Los efectos positivos son físicos y emocionales, como verás a continuación.

  • Condición física

Esta disciplina ayudará a que los niños adquieran una mayor flexibilidad en los músculos y en las articulaciones. Su práctica puede evitarle en la edad adulta muchos inconvenientes.

Por otra parte, un mejor tono muscular y la repetición de posiciones de yoga les brindan el hábito de mantener una correcta postura corporal, algo imprescindible para la salud y la buena apariencia. También adquirirán fuerza, mejor coordinación y más resistencia al cansancio.

  • Relajación y serenidad

La excesiva actividad que vemos en muchos niños es generalmente producto de su salud, pero a veces agota a los adultos y puede ser un inconveniente en determinados momentos. Al pedirles que se concentren y mantengan una postura por un tiempo determinado, los peques desarrollarán una mejor disposición a estar en calma.

Otro beneficio relacionado es la disminución de los niveles de estrés. Aunque pueda sorprenderte, afecta a muchos niños, especialmente en época de exámenes.

  • Concentración

Una de las dificultades que tienen muchos chavales es la de enfocar su atención en una sola cosa, ya que cualquier estímulo los distrae y se dispersan incesantemente. La práctica del yoga hace que se ejercite la concentración, una función imprescindible para actividades como el estudio, las manualidades o la lectura.

  • Conexión profunda

La conexión con su mundo interior es uno de los efectos positivos, que les hará conocerse mejor, dar armonía a sus caracteres y a tener más autoestima. Al mismo tiempo les ayuda a establecer un nexo con el entorno natural con una actitud de respeto. Entre los beneficios del yoga para niños es uno de los más importantes.

  • Funciones corporales

Los cambios de postura durante las sesiones y la necesidad de respirar profundamente, cosa que aprenderán con esta práctica, estimulan tanto al sistema circulatorio como al respiratorio. Sin duda, son condiciones importantes para tener buena salud.

Claves para iniciar a los peques en el yoga

Claro está que la exigencia que hagamos a los niños no puede ser la misma que para los adultos. La diversión que proporcionen las clases es un factor determinante para que les resulten interesantes y agradables. Por estas razones, la disciplina es más relajada y hay espacio para la distensión.

Sesiones

Los períodos en los que se practique el yoga serán más cortos que para las personas adultas. Cada sesión se inicia con las posturas escogidas, unos treinta segundos de relajación entre una y otra, una práctica para el control respiratorio y un ejercicio para aprender a meditar.

Es importante que los instructores de yoga para niños en Bilbao comuniquemos de forma clara las instrucciones, a fin de que cada participante comprenda que se trata de un esfuerzo suave y sostenido. Al principio, bastará con un par de sesiones semanales.

Posturas

Existen algunas posturas más fáciles que otras, claro está, y las adecuadas para los niños son las mismas que para los principiantes. Las mejores a tempranas edades son virabhadrasana 1 y 2, vrksasana, navasana, malasana, entre muchas otras. El Saludo al Sol es conveniente para iniciar la sesión. Con el tiempo y la adquisición de experiencia, pueden pasar a otras más complejas.

Ambiente

Además de ser un espacio donde se pueda interactuar con libertad, es preciso que haya silencio y tranquilidad. Los estímulos externos como el ruido causan distracciones. Es imprescindible también que la habitación esté limpia y cuente con buena ventilación e iluminación.

Vestimenta y alimentación

La ropa que lleven los niños debe ser holgada, para que les permita hacer todos los movimientos con facilidad. Es conveniente que lleven esterillas para estar más cómodos. No es lo mejor que realicen la actividad cuando acaben de comer, pero sí que hayan tomado algo ligero, como una fruta o un yogur.

Como puedes ver, el yoga infantil es una práctica fácil y sencilla con la que los niños tendrán una mejor salud y una condición anímica más estable. Entra en contacto con nosotros para pedir más información o solicitar una primera clase gratuita y lo comprobarás.